Martes 27 de Diciembre de 2005
Martes 27 de Diciembre de 2005
La Asociación de instituciones Educativas de Gastronomía de la República Argentina (AIEGRA), realizó un balance de la actividad educativa y del negocio gastronómico nacional durante el 2005.
Al respecto, la entidad menciona:
- La Gastronomía ha ratificado a lo largo de este año, que no es una actividad secundaria para el país, sino que es una pieza fundamental, no solamente en el desarrollo de los negocios de Viajes & Turismo, sino en la sociedad en su conjunto. Las nuevas inversiones en aperturas y ampliaciones de negocios, el crecimiento de la oferta laboral, el aumento de estudiantes de gastronomía, las ferias y congresos, y los premios y galardones de los profesionales argentinos dan muestra de ello.
- En todo el país se viene apostando a la renovación de los recursos humanos involucrados en la gastronomía, que está permitiendo ofrecer una mejora sustancial en la calidad de los productos, así como un reconocimiento internacional. Esto está siendo posible gracias al aporte educativo que desde hace años vienen realizando los institutos de educación gastronómica nucleados en AIEGRA.
- Los profesionales egresados cuentan hoy con herramientas de capacitación de alto vuelo que los prepara con posibilidades para insertarse laboralmente, tanto en la Argentina, como en el exterior. Es público el reconocimiento de los profesionales argentinos de la gastronomía en todo el mundo.
- La gastronomía no es una moda. Es parte de un desarrollo cultural. Antes la gente pensaba que el conocimiento y la cultura, pasaban por la literatura, la música, el arte, entre otros conocimientos y hoy la cultura también incluye a la gastronomía. En el mundo la actividad viene progresando desde hace años y este desarrollo seguirá creciendo.
- Estamos convencidos de que la educación gastronómica es el motor de la renovación y crecimiento que la Argentina necesita para la mejora en el servicio, no solamente para la sociedad, sino para el negocio del turismo.
En esa línea AIEGRA propone:
1. Frente a este crecimiento del negocio de la gastronomía, que vino para quedarse, continuemos con el compromiso ético y relevante por parte de los institutos de educación gastronómica, de la búsqueda de una mejora de los niveles educativos y la inversión en equipamiento y tecnología.
2. Mantener un alto nivel en la enseñanza, continuar valorizando la figura del “Cocinero” como una pieza clave del quehacer gastronómico.
3. Buscar que los empresarios gastronómicos tomen conciencia de la importancia de la formación y la capacitación.
4. Incentivar la transparencia y luchar contra el oportunismo especulativo, que trae consecuencias desastrosas, tanto al alumno que es defraudado como a sus familias que lo apoyan en sus estudios.
5. Jerarquizar la profesión del “Cocinero”.
6. Impulsar la calidad en la gestión de los institutos y empresas, no sólo como una manera de crecer, sino de satisfacer a los estudiantes y clientes.
7. Incentivar la oportunidad y conveniencia de continuar fomentando la actividad educativa gastronómica para conseguir alcanzar el liderazgo mundial en la actividad.